Carlos Moron Cabrera

Hola a todos empezaremos este blog dedicado al arte, sobre todo al de algunos artistas poco reconocidos.
Entre ellos tenemos a Carlos Morón Cabrera, conoceremos un poco más sobre un retratista canario del siglo XX desconocido para la mayoria del público, pero sí valorado en el extranjero llegando a retratar incluso al Sha de Persia y otros familiares.

domingo, 5 de abril de 2015

LAURA VILLA MORALES: ARTE EN GRAFITO



                
          En un lugar de Trujillo (Venezuela) nació….….   Así empezaría la Historia de Laura Villa Morales (16/05/1986), quien se traslada a la pronta edad de un año y medio a Sevilla, lugar natal de su padre. Allí realiza sus estudios en música, tocando la trompa o corno francés, y canto lírico.
            Su vocación artística le llevó a estudiar Bellas Artes y Publicidad, estudios que continuará en un fututo próximo. No es nada extraño que viviendo en una ciudad tan llena de belleza y cultura, se entusiasmara con el Arte, y sobre todo con el retrato en cualquiera de sus modalidades, materiales o soportes, que generalmente realiza en papel DIN A3. 
            Conseguir captar en una obra el rostro, las manos, o  esos pequeños detalles del representado es algo casi milagroso, la sensibilidad de la creadora y su saber hacer debe ser mayor para captar ese “pathos”, me refiero a la emoción que se logra en una obra de arte y que consigue transmitir a quien la contempla.
            Laura lo consigue, es capaz de representar a personajes famosos y anónimos, pero quizás estos últimos son para mí los más gloriosos, porque en ellos, la artista no está condicionada; se les puede captar su esencia, captar a la persona. El detallismo es mayor, y tal vez son esos retratos por encargo en los que quizás, ella puede apreciar ese halo de vida que los retratistas siempre buscan.
            Llama la atención un retrato femenino, con un pelo esplendido pintado a lápiz, con la única ayuda de una goma de borrar y su dedo. La chica representada aparece tocada por plumas perfectamente dibujadas, totalmente ligeras, movidas por la brisa o simplemente por el movimiento natural al levantar su mano.  Se toca dulcemente la pata de las gafas y con ellos Villa nos muestra por un lado las calidades táctiles de los objetos. Viene dado por el enorme detallismo en los objetos que representa, como pulseras y anillos totalmente labrados, y unas lentes cuyo cristal está tan limpio que podemos ver lo que hay delante de la representada.
            Otra parte muy difícil para ser representada por un autor o autora son las manos.  En la historia del arte, de una forma u otra, los artistas las dejaban inacabadas, pero Laura consigue darle las carnaciones. Gracias a eso podemos observar como es su piel, sus músculos y dedos, todo bajo un magnífico rostro jovial.
            El retrato de varón a cuerpo entero, fue encargado por su novia. El cruce de piernas deja ver la zona sexual, que queda remarcado por el uso de la música que conduce al romanticismo. Además, va unido a la carta que le hace escribir a la autora a un lado, sacrificando así parte de la guitarra. Aquí no menoscaba los detalles, tanto de los tejidos como de la cabellera como el vello de sus brazos y piernas, son prácticamente palpables, al igual que los más gruesos de su barba.
            A Jeremy Iron, un excelente y bello actor, le dibuja un rictus serio, fumando un cigarrillo, pero la estrella del retrato es el monóculo que le abre el ojo, nos permite comprobar sus venitas, deducir incluso el color rojo producido por el humo del tabaco. Un cristal translucido, brillante, en un fondo neutro donde lo único que vemos de su anatomía, es su hermoso rostro con luces y sombras; un hombre que incluso nos mira con cierta tristeza.
            Sigo pensando que Laura capta el alma de sus retratados, y capta la diferencia entre los hombres y las mujeres, actores o actrices. Representa a los varones desde un lado más oscuro que quizás ella percibe claramente, en cambio, ellas son seres de luz, realizados con muy pocas líneas, felices y risueños de corazón. Hace hincapié en tejidos y cabellos, por ejemplo, la actriz Rita Hayworth, que parece algo triste, aunque con su enorme belleza; pelo peinado con ondas que remarca su rostro, y cuya mano se convierte en una excusa para destacarle su hermosura, sin embargo no con ello descuida la calidad de la misma.
            Permítanme citar a Auguste Rodin (1840,1917) que dice “El arte es el placer de un espíritu que penetra en la naturaleza y descubre que también ésta tiene alma”.
            Esto podemos observarlos en los bellísimos retratos de Laura Villa.






FUENTES:
Fuente oral:
VILLA MORALES, Laura